Google ridiculiza a Apple por caos de Siri IA. En un tuit inesperado, la compañía ha criticado la mala integración de inteligencia artificial en Siri, comparándola con productos de menor calidad tras los recientes problemas de la plataforma.
Un tweet viral como arma de campaña
Google publicó un tuit donde compara irónicamente a Siri con modelos públicos inferiores, como una señal de que la integración de IA en Apple no está al nivel esperado. El mensaje contrastó con el propio enfoque de Google, que ha acelerado el despliegue de modelos generativos avanzados en productos como Bard y Gemini.
La crítica directa provocó reacciones mixtas en redes, pero dejó claro que Google sugiere que Siri quedó obsoleta tras la falta de avances reales en su IA asistida por voz.
¿Qué ha fallado en Siri?
Siri ha sufrido varias actualizaciones con promesas de integración de IA avanzada, pero muchas se han quedado en demos o funciones experimentales. Usuarios y desarrolladores han reportado:
- Respuestas incoherentes o generadas por GPT sin contexto
- Falta de mejoras tangibles en reconocimiento de comandos complejos
- Retos para entender acentos o entonaciones fuera de lo estándar
Mientras tanto, competidores como Google y Microsoft han lanzado IA conversacionales que funcionan con lógica contextual y aprendizaje activo, dejando a Siri con voz pero poco músculo detrás de ella.
¿Marketing o realidad?
La provocación pública de Google entra dentro de una estrategia agresiva para destacar sus avances. Apple, por su parte, no ha emitido una respuesta oficial al tuit.
El contraste entre plataformas plantea una pregunta clave: ¿Apple realmente ha invertido en IA profunda o solo ha aplicado parches superficiales? Siri, a día de hoy, parece un asistente con voz neural, pero sin la inteligencia generativa que ofrecen otros modelos.
Conclusión
La publicación de Google refleja una brecha creciente entre promesas y resultados reales en aplicaciones de IA conversacional. Si bien Google critica a Siri, el mensaje también sirve como advertencia: sin avances significativos, incluso productos icónicos pueden parecer obsoletos frente al rápido avance de la inteligencia artificial.
